Compra Estratégica es una metodología utilizada en muchas empresas para darse cuenta de todos los beneficios que puede tener una empresa, cuando se gestionan eficazmente los costes asociados a la adquisición de materias primas y componentes operacionales.
A diferencia de la compra táctica, que tiende a ver el proceso de compra como algo alejado de otras funciones dentro de la estructura corporativa, la compra estratégica intenta promover el uso más eficiente de todos los materiales en toda la empresa. El objetivo de este tipo de compra es aumentar las ganancias de la empresa a través de un uso más juicioso de los enfoques y estrategias de compras.
Una de las formas en que la compra estratégica se lleva a cabo es a través del análisis de cómo se gasta el dinero. La idea es determinar si hay alguna manera de mejorar el proceso de compra mediante el ajuste de las directrices asociadas a la requisición de materiales o hacer pedidos a los proveedores. A menudo, este tipo de análisis de gastos revelará una o dos pequeñas maneras de hacer más eficiente el proceso y posiblemente ahorrar a la empresa tiempo y dinero.
Atender las necesidades actuales y proyectadas de la empresa también es parte de la compra estratégica. Por ejemplo, la atención a la compra de nuevo software o de equipos informáticos tiene lugar mucho antes de que se presenta la necesidad. Esto permite que el departamento de compras pueda evaluar una serie de opciones y se asienta en la solución que está es en los mejores intereses de la empresa sin tener que tomar decisiones rápidas en el último minuto.
La compra estratégica también implica la construcción de relaciones entre compradores y proveedores. Trabajando juntos, puede ser posible agilizar el tiempo al procesar un pedido con el proveedor, lo que reduce la necesidad de mantener un mayor inventario. Dependiendo del volumen de negocios realizado por la empresa con el proveedor, también puede ser posible encontrar la manera de agilizar la entrega también.
El uso de la planificación estratégica también significa automatizar tanto del proceso de planificación como sea posible. Tareas que son de rutina a menudo se pueden configurar para la terminación por software u otros medios automáticos. Esto libera a los agentes de compras para centrarse en otros aspectos del proceso de compra y así aumentar las posibilidades de utilizar los recursos disponibles con más eficiencia.
Al final, este método tiene que ver con la redefinición de hábitos de compra, procesos y comportamientos para que la empresa cuente con el mayor beneficio posible. Desde esta perspectiva, la compra estratégica no es un evento, sino un proceso continuo que implica la interacción de profesionales de compras con los proveedores, y la administración de la empresa .
Con información de http://www.wisegeek.com/what-is-strategic-purchasing.htm